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Están a punto de empezar una de las celebraciones más importantes en la cordillera andina, las ofrendas y despachos a la tierra o PACHAMAMA.

Agosto es el mes de los colores, las flores, los sahumerios, los verdes de la hoja de coca y los elementos sagrados que se unen en un acto ritual,  la ofrenda a la PACHAMAMA, deidad que representa a la Madre Tierra, fuente de vida y nutrición.

Estas oraciones se entregan a la Gran Madre, al hogar donde habitan todos los seres de la creación para agradecer la provisión de alimentos, el cobijo, la fertilidad y sobre todo la protección que nos da.

Es una reciprocidad entre el mundo material y espiritual, un equilibrio entre la persona y la tierra por la producción recibida.  

 

LA GRAN MADRE

 

Curiosamente, agosto es el mes de la Madre María, la mujer que engendro a Jesucristo, "la Gran Madre" de la iglesia católica.

Una de las fechas más señaladas es  el  15 de agosto día de la muerte y ascensión de la virgen María la cual coincide con las culturas de Oriente Próximo donde honraban a una "Gran Madre", la diosa Siria Atargatis, mitad mujer y mitad pez, considerada la patrona de la fertilidad y de los trabajos en los campos.

Tan solo en España hay más de 22.000 advocaciones a la virgen y sus santuarios y unas 50.000 imágenes marianas. En agosto y septiembre las fiestas en honor a la virgen son más numerosas que el resto del año.

Vamos más atrás, ya que el 13 de agosto se celebraba un gran festival en honor a Hécate, la Diosa-Luna de Grecia, y de Diana, su descendiente directa en Roma.

Ambas deidades eran aclamadas como guardianas de la tierra para alejar las tormentas hasta que se hubieran cosechado los frutos.  

HONRAR LA TIERRA

 

En la península Ibérica desde junio hasta agosto, los campos sembrados daban origen a todo tipo de fiestas en forma de danzas, cantos y manifestaciones paganas para "vitalizar" a la tierra y obtener buenas cosechas.

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Algunos de estos actos han llegado hasta nuestros días prevaleciendo en la tradición oral y familiar sobretodo en las sociedades agrícolas. 

Aunque no seamos agricultores debemos poner una intención de gratitud a este planeta tierra.

De todos es sabido el retroceso y abuso de recursos que se ha hecho y se hace, eruditos del tema dan sus informes y estudios con cifras escalofriantes.

Nada se puede hacer en contra de aquello que se nos fue de las manos, pero si hay algo que nada ni nadie nos arrebatará como es nuestro espíritu.

El día oficial de la tierra es el 24 de abril, personalmente me siento mucho más identificada con el mes de agosto y el culto a la PACHAMAMA que se realiza en los primeros días del mes con los despachos y ofrendas.

Hay toda una historia ancestral que nos une. Hay un espacio, el planeta azul, que es el hogar de todos. Durante este mes de agosto oremos por la Pachamama y agradezcamos por todo lo que nos da.

Esta Gran Madre, que tiene múltiples manifestaciones en toda la Tierra solo nos da un mensaje unánime:

"Os cuido, acompaño y nutro con todo mi amor"  

Ana Hatun Sonqo