En este post vamos a revelarte alguno de los trucos que te ayudarán a entrar con buenas energías en el cambio de estación.
Como muchos sabéis, la noche del 21 al 22 de junio se celebra el solsticio de verano en el hemisferio norte y el solsticio de invierno en el hemisferio sur.
Sin duda se trata de una de las mejores oportunidades para aquellas personas que buscan desprenderse de todo aquello que bloquea la renovación en sus vidas.
Pero, ¿cuáles son las claves para hacer posible dicha transformación?

1 - La palabra Solsticio significa sol inmóvil:

Lo que implica que el día y la noche es igual y, por lo tanto, trabaja las dos polaridades. En otras palabras, es momento de equilibrar tu propia luz y oscuridad y reconocerte como unidad.

2 - Abre las puertas del más allá:
Nuestros ancestros creían en la apertura de las fronteras del mundo invisible. En el solsticio de verano, los dioses se hacen hombres, la energía del cosmos acude a empoderarnos y en el solsticio de inviernos los hombres se hacen dioses, elevándonos al infinito.

3-Se mudan los elementales a sus alojamientos estacionales: 
Muchas entidades son consideradas seres menudos y por tanto estas hadas y gnomos permanecen invisibles a nuestros ojos físicos.
El solsticio de verano promueve el cambio de residencia al alojamiento invernal y en el solsticio de invierno a la casa de veraneo. Si tienes la posibilidad de participar en un retiro espiritual  durante esos trayectos es mucho más fácil invocarlos y conectar con ellos. 
En nuestros retiros encontrarás el espacio adecuado para posibilitar ese encuentro y abrirte a sus posibles dones.

4- Los fuegos ancestrales:
nos ayudan a purificar, a soltar aquello que es pesado para renovarnos.
El solsticio de verano aviva sus fogatas para tener energía todo el año y en el solsticio de invierno para calentar nuestra alma. Pon candela a tus sentimientos más íntimos; deja partir lo accesorio y abre tu corazón a lo nuevo.

5-Despierta a la Naturaleza: 
Si en la madrugada podemos recoger el rocío de las plantas estamos bendecidos. Si podemos lavarnos la cara, manos y pies con el sagrado elemento tendremos belleza.
Tocaremos con transparencia aquello que llega a nuestro encuentro y caminaremos de forma sagrada la senda de la vida.

6-Símbolos vegetales propios de los solsticios: 

Son muy protectores ya que facilitan la salida y entrada de buenas energías. Por tanto colocar plantas aromáticas en las puertas en forma de arco filtra los visitantes indeseados y ayuda a atraer benefactores a nuestro hogar.

7-Es el momento de Oracular:

Como en anteriores ocasiones ahora se trata de recibir los mensajes que nos van a acompañar en el próximo semestre.
Por eso pon un cuenco plateado o transparente lleno de agua, al lado coloca una vela blanca con tu sahumerio favorito y en la mano izquierda sostén  una piedra especial para ti. Entonces cierra los ojos y respira tres veces profundamente.
Abre tus ojos y mira el centro del cuenco preguntando aquello que deseas saber. Déjate llevar. Quien busca, encuentra...

8-Céntrate con un ritual adivinatorio:
 Este es uno de mis rituales favoritos. Ten preparado un vaso con agua templada y un huevo.
A las 12h en punto, cuando están sonando las campanadas, rompe el huevo dentro del vaso con el agua con la intención de saber cómo te irán los próximos meses.
Déjalo reposar unos 10m. Obsérvalo,  porque te revelará con las formas que hace el huevo el destino del año. Se puede hacer en el solsticio de verano y/o invierno.

9-La transformación sigue en proceso: 
Báñate con flores (romero, lavanda, albahaca, ...) y aromas embriagantes durante los próximos días o semanas. Deben ser, en el solsticio de verano, flores blancas y amarillas. Son mejores, en el solsticio de invierno, rojas y naranjas.

Conclusiones:

Ahora ya tienes algunas claves para hacer de este mundo un lugar más amable. Sin duda ya estás unido a la energía cósmica donde tus deseos se hacen  realidad.

A pesar de que todos los retiros espirituales que celebramos a lo largo del año aportan enormes beneficios hay que saber que existen momentos de gran fuerza espiritual como son los solsticios.

Es hora de abrirnos a lo nuevo.

¡Feliz Solsticio!